Entre 1915 y 1923 se produjo un genocidio que la humanidad aún no valora en su correcta dimensión
La fortaleza de un pueblo Entre 1915 y 1923 se produjo un genocidio que la humanidad aún no valora en su correcta dimensión: un millón y medio de armenios fueron masacrados por los turcos.
En Rosario, los descendientes de las víctimas no cesan en su reclamo. “¿Y el idioma qué culpa tiene?” le respondía Pedro Kassabian a su mujer Rosa Sahakian, cada vez que ella le preguntaba por qué le seguía hablando en turco después de todo lo que les habían hecho. El idioma no tenía la culpa, pero aquellos que le prohibieron a Pedro en su tierra hablar en armenio, sí. Rosa lo entendía, pero hasta el resto de sus días le respondió en armenio. Argentina tiene una de las diásporas armenias más grandes del mundo.
En Rosario viven más de 300 descendientes que siguen recordando y reclamando que el Estado turco reconozca el genocidio llevado a cabo entre 1915 y 1923, en el que más de un millón y medio de personas fueron aniquiladas.
Acto y convocatoria
Este martes 24 se conmemoran 103 años del genocidio armenio perpetrado por el Estado turco. Los descendientes de quienes llegaron exiliados a Rosario realizarán un acto en el Memorial no me Olvides (Dorrego y el río) a las 13 horas, para recordar al millón y medio de víctimas y seguir reclamando el reconocimiento que aún hoy es negado. Además, a las 19, la Cátedra Armenia de la UNR realizará un conversatorio en el Museo de la Memoria.
*Extracto de nota publicada el domingo 23 de abril en la sección Cultura y Libros del diario La Capital, cuya autoría corresponde a Tefi Sahakian.